El análisis FODA es uno de los recursos fundamentales a la hora de determinar la situación actual y los pasos que deben darse para alcanzar el futuro que se quiere en un plazo determinado. Por eso, este análisis es gravitante a la hora de realizar una Planificación Estratégica. No puede haber Plan si no existe un FODA que respalde y explicite claramente el porqué de cada una de las acciones.
El análisis FODA consiste en hacer un diagrama en forma de cruz (+) con cuatro cuadrantes. En los dos cuadrantes superiores analizamos el Ámbito Interno y en los inferiores el Ámbito Externo.
El análisis Interno consiste en identificar las Fortalezas y Debilidades; el Externo: las Oportunidades y Amenazas.
Esto que suena tan simple, no lo es tanto. ¿somos capaces de reconocer nuestras debilidades, o de detectar la verdad de nuestras fortalezas? ¿Tenemos la visión para captar las Amenazas y Oportunidades que nos ofrece el entorno?
Una cosa que siempre sugiero a los microempresarios y alumnos a los que me toca dar charlas sobre este tema, es que conviene partir siempre por el FODA básico, es decir el propio, pues de esta forma se puede detectar la situación actual y, a partir de ahí, elaborar planes para el futuro.
¿Cuales son mis fortalezas y cuales son mis debilidades?. Al hablar en los términos propios es como ponerse frente al espejo: ¿qué me gusta, en qué cosas soy afin? ¿qué me cuesta hacer, por qué no se entiende lo que digo? Y al trasladar todo esto a la Empresa se pueden identificar los puntos fuertes como posición en el mercado, experiencia, niveles competitivos: o los débiles: incapacidad de abrirse a nuevos clientes, lentitud en los procesos, etc.
Por el lado del ámbito Externo sólo un buen conocimiento interno podrá detectar la forma de enfrentar las amenazas (Competencia, productos alternativos, crisis externas) y aprovechar las Oportunidades (nuevos mercados, cambios en los hábitos de consumo, desarrollo de nuevos satisfactores)
Cuando se tiene un buen FODA y se pide a agentes externos que acrediten que es real (en el caso del FODA personal es como preguntarle a un amigo que lo que se dice ahí es cierto), podemos emprender el diseño del futuro. Ese FODA nos transmite la situación actual, el presente. Pero a partir de él, el diseño del FODA que queremos alcanzar en un plazo de 3 o 5 años, por ejemplo.
Se trata de un trabajo que está en continuo en movimiento porque las fortalezas deben estar siempre potenciándose para aprovechar con vigor las oportunidades; y las debilidades corrigiéndose para atenuar las Amenazas. Y el proceso de elaborar un plan concreto, real, que asuma la situación actual y piense con certeza y realismo el futuro deseable, se llama Planificación Estratégica.
El análisis FODA consiste en hacer un diagrama en forma de cruz (+) con cuatro cuadrantes. En los dos cuadrantes superiores analizamos el Ámbito Interno y en los inferiores el Ámbito Externo.
El análisis Interno consiste en identificar las Fortalezas y Debilidades; el Externo: las Oportunidades y Amenazas.
Esto que suena tan simple, no lo es tanto. ¿somos capaces de reconocer nuestras debilidades, o de detectar la verdad de nuestras fortalezas? ¿Tenemos la visión para captar las Amenazas y Oportunidades que nos ofrece el entorno?
Una cosa que siempre sugiero a los microempresarios y alumnos a los que me toca dar charlas sobre este tema, es que conviene partir siempre por el FODA básico, es decir el propio, pues de esta forma se puede detectar la situación actual y, a partir de ahí, elaborar planes para el futuro.
¿Cuales son mis fortalezas y cuales son mis debilidades?. Al hablar en los términos propios es como ponerse frente al espejo: ¿qué me gusta, en qué cosas soy afin? ¿qué me cuesta hacer, por qué no se entiende lo que digo? Y al trasladar todo esto a la Empresa se pueden identificar los puntos fuertes como posición en el mercado, experiencia, niveles competitivos: o los débiles: incapacidad de abrirse a nuevos clientes, lentitud en los procesos, etc.
Por el lado del ámbito Externo sólo un buen conocimiento interno podrá detectar la forma de enfrentar las amenazas (Competencia, productos alternativos, crisis externas) y aprovechar las Oportunidades (nuevos mercados, cambios en los hábitos de consumo, desarrollo de nuevos satisfactores)
Cuando se tiene un buen FODA y se pide a agentes externos que acrediten que es real (en el caso del FODA personal es como preguntarle a un amigo que lo que se dice ahí es cierto), podemos emprender el diseño del futuro. Ese FODA nos transmite la situación actual, el presente. Pero a partir de él, el diseño del FODA que queremos alcanzar en un plazo de 3 o 5 años, por ejemplo.
Se trata de un trabajo que está en continuo en movimiento porque las fortalezas deben estar siempre potenciándose para aprovechar con vigor las oportunidades; y las debilidades corrigiéndose para atenuar las Amenazas. Y el proceso de elaborar un plan concreto, real, que asuma la situación actual y piense con certeza y realismo el futuro deseable, se llama Planificación Estratégica.